
Sinopsis de la película: Esteban
sueña en hacerle un guion cinematográfico a su madre Manuela, pero
desafortunadamente con tan sólo 17 años fallece, y Manuela va en busca del
corazón donado de su hijo.
No voy a hacer una crítica
de la película, lo dejo para los especialistas, pero sí voy a hacer mi
particular tributo a una madre, MI MADRE.
En mi primer post, el de presentación, yo misma eché de menos no darle las
gracias a ella, pero creí que ella merecía algo personalizado y más extenso.
Ella es mi Yang, creo que es
la persona que mejor me conoce, me
ama incondicionalmente, me templa, me hace “monerías” cuando tengo un día
triste, se colma de paciencia y me soporta cuando estoy insoportable, me
alienta, pide con insinuaciones, siempre tiene una sonrisa para mí, adora a mis hijos, acoge a mi marido
como si fuera un hijo más, le quita importancia a los problemas, me tiende una mano cuando caigo, me
espera con una sopa caliente en invierno y con un gazpacho en verano y me hace
los mejores bocadillos del mundo. Siempre está ahí, y con su ejemplo me enseña
cada día a ser mejor persona; allá donde ella va, ejerce de mi mejor embajadora.
Por supuesto que tiene
defectos (bueno, llamémosle aspectos de mejora), como todas las personas
tenemos, pero sus virtudes los superan con creces, y aunque yo ya tenga 46
años, ella sigue siendo así conmigo.
Siempre me dice que el
carnet de madre lo dan sin examen, pero si ella lo hubiera tenido que pasar,
con toda certeza su nota sería de
Matrícula de Honor.
Siempre tengo su cobijo, me contagia su vitalidad y sus
ganas de vivir y me faltaría tiempo de vida para poder agradecerle todo lo que
hace por mí. Soy lo que soy y como soy
gracias a ella.
¿Tendré yo las cualidades de
mi madre?.... ojalá la genética haga su papel….
¡Viva
la madre que me parió! ;-).